Las operaciones de salvamento han sido suspendidas temporalmente para mitigar los efectos ambientales derivados de un buque de carga que se hundió tras un ataque con misiles hutíes, así como para recuperar otro buque abandonado durante un asalto. Esta decisión se mantendrá vigente hasta que disminuyan las agresiones a embarcaciones en el Mar Rojo, según informó la agencia reguladora del transporte marítimo de las Naciones Unidas.
El buque Rubymar, de bandera británica, se convirtió el mes pasado en el primer navío perdido desde que los hutíes comenzaron a atacar embarcaciones en noviembre de 2023. El buque de carga se hundió con una carga de 21.000 toneladas métricas de fertilizante y ahora yace sumergido en aguas poco profundas entre Yemen y Eritrea.
Por otro lado, el buque True Confidence, de propiedad griega, fue abandonado a principios de este mes luego de ser incendiado en un ataque que resultó en la muerte de tres miembros de la tripulación cerca del Puerto de Adén en Yemen.
Las labores de rescate son de vital importancia para proteger la vida marina y los entornos costeros de posibles daños causados por derrames de combustible y cargas peligrosas.
El incidente con el Rubymar ha provocado un derrame de petróleo de 18 millas, y los expertos continúan preocupados por una posible fuga de fertilizante que podría desencadenar floraciones de algas devastadoras en el Mar Rojo, afectando negativamente a los frágiles arrecifes de coral.
Escríbenos por WhatsApp